Lectura: Juan 12:3-9
Judas es una figura del hombre religioso, él tuvo la oportunidad de ser salvo y no lo fue. Es de este tipo de personas que habla en Hebreos capítulo 6. Personas que perdieron su oportunidad de ser salvadas. Ahí dice: *"Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, ***y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio." (Hebreos 6: 4-6).
Judas fue iluminado. Caminó en presencia de la luz del mundo, pero eligió la oscuridad. Él probó el don celestial —Cristo— es como alguien que sólo prueba una bebida sin querer beberla. Él tenía su parte de los beneficios del Espíritu Santo, quien convence de pecado, de justicia y del juicio venidero, pero Judas cauterizó su conciencia.
La boca de Judas probó y predicó la buena Palabra de Dios, y también experimentó los poderes o milagros del mundo venidero. Aun así, decidió no creer. Es imposible que una persona se arrepienta después de rechazar tantas oportunidades.
Cualquiera que vió a Judas caminando con Jesús nunca dudaría de su fe. Pero esa fe nunca existió. Judas solo llevaba una fantasía cristiana, como muchos lo hacen, no creen en Cristo como Señor y Salvador. A todos les gusta la idea de un Salvador Jesús, pero no todos lo quieren como Señor o dueño absoluto de su vida y voluntad.
Lo que siempre hacemos voluntariamente es rebelarnos contra Dios. Cuando Jesús caminó aquí, dejó en claro que su deseo era hacer la voluntad del Padre, no su propia voluntad. Ahora, si él, que es Dios y Hombre, sin pecado, y cuya voluntad es más que perfecta, no quería hacer su propia voluntad, ¿Qué nos pasa a nosotros débiles y pecadores?
¿Sabes lo que significa la palabra "pecado"? En 1 Juan 3:4 dice que "el que comete pecado también comete maldad; el pecado es maldad". Algunas versiones de la Biblia dicen que "el pecado es la transgresión de la Ley", pero es un error de traducción, porque el pecado existía antes de la Ley dada a Moisés. El pecado en su sentido original es ser gobernado por la voluntad propia, que es lo mismo que no ser gobernado. Otra versión dice que "el pecado es rebelión".
Así vivían los cristianos de Éfeso antes de su conversión, y Pablo les recuerda esto en la carta a los Efesios, capítulo 2: "... vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, ****en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás" (Efesios 2:1-3).
Es hora de que sometas tu vida y voluntad al Salvador y Señor Jesús para ser salvo eternamente. Esta es tu oportunidad. ¿Qué puede pasar si no lo haces? Eso lo veremos en los próximos 3 minutos... si aún tienes 3 minutos.
