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Todo aquel que el Padre me da
Lectura:Juan 6:37
Digamos que un día has oído el Evangelio, sentiste el peso de tus pecados y decidiste creer que Jesús es Dios y Salvador. En ese momento todos tus pecados fueron perdonados; has sido totalmente purificado por la sangre del Cordero de Dios y eres habitado por el Espíritu Santo. Una nueva vida se abrió delante de tus ojos. Pero ¿qué es realmente lo que te llevó buscar a Jesús? La respuesta está en el capítulo 6 del Evangelio de Juan. Jesús dice: "todo lo que el padre me da, vendrá a mí" (Jn 6:37). ¿percibes? Primero el Padre te entregó a Jesús, después fuiste a Él. Dios ya te había incluido en su agenda, y por eso creíste en Jesús. Ir a Jesús no era tu idea, sino del Padre. En su carta a los Efesios Pablo habla de esta elección, elección y predestinación. A menos que rompas algunas páginas de tu Biblia, es innegable que los salvados son elegidos por Dios. quizá digas: "bueno, entonces no me preocupo. Si Dios quiere salvarme, él lo hará ". OK, entonces siéntate y espera el tren de la salvación, pero sólo quiero hacerte saber que con una mentalidad así no estarás sentado en la estación, sino encima de los rieles Es un error pensar que creer en Jesús es una cuestión de elección, como si estarías en un terreno neutral, decidiendo entre salvación y condenación. No es así. Todos nacimos condenados y literalmente en el camino de la muerte. La única opción es creer en Jesús, algo que ciertamente no está en nuestra agenda, ya que nacemos enemigos de Dios. Pero, si es Dios quien escoge, ¿cómo saber si has sido escogido? Creyendo en él. Los nombres de los escogidos no aparecen fuera de la puerta, sino solo por dentro. La soberanía de Dios en escoger a quien él quiere es una verdad bíblica tanto como la responsabilidad humana de creer en Jesús. Yo puedo no entender para que creer si Dios ya me eligió, pero eso no cambia el hecho de que estamos ante una verdad bíblica. Yo no entiendo cómo actúa un medicamento en mi organismo, aun así, tengo que tomar. Es por eso que somos salvos por fe, no por lógica. ¿Pero no sería Dios injusto al elegir a uno para ser salvo y a otro para ser condenado? Dios no escoge quien será condenado, pues todos nacimos en esta condición por ser pecadores. No puedes negar que tienes un "expediente de culpa" de pecados. Dios es justo al condenar al pecador y es misericordioso al elegir a quien quiere salvar. Responda rápido: Cuando el presidente de un país donde existe la pena máxima concede perdón a un condenado a muerte, ¿acaso está siendo injusto para los otros delincuentes que serán ejecutados? Si estás sorprendido con la declaración de Jesús que dijo '' todo lo que el padre me da, vendrá a mí" (Jn 6:37)., espere hasta descubrir en los próximos 3 minutos, como termina esa frase.
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